El inicio del viaje de los alimentos

2022-08-26 18:45:20 By : Mr. Jerome Lin

Alina Gabriela Monroy-Gamboa y Sergio Ticul Álvarez-Castañeda/CIBNOR/DICYT La boca de los mamíferos puede ser diferente en forma y color, pero en general se encuentra situada en el rostro por debajo o delante de la nariz. La boca de las ballenas y delfines es una de las más diferentes, debido a que es anterior a las narinas, las que se encuentran en la parte más dorsal del cráneo.

La boca es una cavidad que se cierra y abre a voluntad y en la que se realiza la maceración de los alimentos. Está constituida por la bóveda palatina, dientes, lengua, labios, mejillas, velo del paladar y faringe. Existen unas estructuras llamadas arcos alveolodentales que la subdividen en dos porciones, una anterolateral o vestíbulo, donde se ubican las mejillas, cara interior de los labios, encías y el orificio bucal del conducto parotídeo. La otra porción es la interior o cavidad oral donde está el istmo de las fauces, la base de la lengua, la úvula, las tonsilas o amígdalas y es donde se conecta la faringe.

Los labios son la estructura más externa de la boca. Están conformados por piel y contienen muchas terminaciones nerviosas, es decir, son muy sensibles al tacto. Los labios de los mamíferos son diferentes entre las especies, en varias de ellas son usados como herramientas debido a que tienen sensibilidad, pueden ejercer presión selectiva, tienen amplia movilidad y la piel que los recubre puede ser de grosores diferenciales. Este conjunto de características les ayuda a escoger los alimentos que van a ingerir, casi como si fuera un apéndice.

La jirafa tiene labios gruesos y una lengua larga con las que puede seleccionar las hojas tiernas de las que se alimenta entre las espinas de las acacias. Las diferentes especies de manatíes, que son herbívoros acuáticos, poseen un labio superior muy flexible y grueso que les permite buscar y seleccionar su alimento.

El paladar es una estructura dura y blanda a la vez. La sección dura se debe a que contiene los huesos maxilares superiores. La sección blanda se encuentra en la parte posterior y está conformada por tejido muscular. Ambas secciones están recubiertas por una túnica mucosa y son el techo de la caja de masticación. La lengua es un músculo muy importante que forma el piso de la boca en conjunto con el surco alvéolo lingual.

Está fijada por numerosos músculos en el hiodeo, la mandíbula y proceso estiloideo del hueso temporal. En la parte superior se encuentran las papilas gustativas y dentro del tejido epitelial que las recubre se encuentran los denominados calículos gustatorios que son los que ayudan al organismo a identificar sabores, por lo que son las estructuras del sentido del gusto. La función de la lengua es muy importante debido a que es el músculo que mueve el alimento dentro de la boca y que permite ubicarlo en el sitio adecuado para la molienda o ayudar de manera activa a que pueda ser tragado. Las lenguas de los mamíferos también varían en tamaño, por ejemplo, la lengua de los organismos que se alimentan de néctar de las flores es muy larga como en el caso de algunos murciélagos en contraparte las de los herbívoros son muy grandes y voluminosas.

En las mandíbulas, superior e inferior, se encuentran los dientes. La cantidad, forma y tamaño de las piezas dentarias también es diferente entre las especies de mamíferos. La principal causa de esta variación se debe al tipo de dieta. Los herbívoros tienen dientes más aplanados que les ayudan a triturar mejor las plantas que comen; en cambio los carnívoros poseen piezas dentales que les ayuda a cortar la carne de sus presas. Los mamíferos tenemos dos etapas de dentición, la primera es la denominada temporal o “de leche”, la cual permanece durante el periodo de crianza. La segunda es la dentición permanente que contiene todas las piezas dentarias de la especie.

En la cavidad bucal se presentan los conductos de las glándulas salivales mayores, dos submaxilares (en el piso posterior de la boca) y dos sublinguales (se encuentran delante de las submaxilares). Ambos tipos de glándulas presentan su conducto excretor debajo de la lengua. La saliva es un líquido que contiene enzimas. Una es la ptialina (amilasa salival) que ayuda a desdoblar la compleja composición de los carbohidratos, para que puedan ser digeridos correctamente.

Las funciones de la boca son ingerir, triturar e insalivar los alimentos para convertirlos en una papilla denominada bolo alimenticio. La realización de estas funciones es gracias a las estructuras que la componen.

Los dientes trituran y desgarran los alimentos; la lengua y las mejillas ayudan a mezclar los alimentos, la saliva ayuda a la digestión química, mantener la humedad para la molienda y es el aglutinante del bolo alimenticio, lo que forma una pasta que le permite a los alimentos continuar su proceso de digestión.

Este proyecto ha sido cofinanciado por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, dentro del Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica 2008-2011. Referencia: TSI-090100-2011-36