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La magia del cine nos permite disfrutar de la Navidad mientras aprendemos a celebrar cualidades como la humildad y la bondad con los niños (y no tan niños) con las recomendaciones de Esmeralda Velasco, orientadora en un centro escolar.
La ilusión en los ojos de un niño cuando se despierta el día 25 de diciembre y va corriendo a ver qué regalos le esperan debajo del árbol no tiene precio. Todos querríamos volver a esa etapa de la vida en la que todo es un poco más fácil, más ingenuo y, por ende, más feliz.
La Navidad es una época para celebrar con los seres queridos y revivir esa ilusión que sienten los más pequeños de la casa, un momento idóneo para acurrucarse en el sofá bajo la manta y ver alguno de los filmes clásicos de esta época del año.
De todos los planes que se pueden hacer en estas fechas, el cine es una de las mejores formas que tenemos de conectar con los niños y qué mejor que hacerlo pasando nuestro ocio con ellos mientras se divierten y aprenden. Esmeralda Velasco, orientadora de un centro escolar en Madrid, nos propone 10 películas que ver con los más peques de la casa:
Susan, una niña de 6 años, está segura de que Papá Noel existe. Todo cambia cuando, durante el desfile de los grandes almacenes Macys, el señor que encarna a Santa Claus es reemplazado. Un anciano llamado Kris se ofrece a encarnar a la figura más popular de la Navidad, clavando el papel, porque en realidad él es el verdadero Papá Noel.
Scott Calvin es un padre divorciado que pasa lo que en principio iba a ser un día normal de Navidad con su hijo Charlie, hasta que oye un ruido en el tejado. Cuando se acerca a ver qué ha ocurrido, descubre que el verdadero Santa Claus se ha caído al vacío y ha fallecido. La magia de las fiestas obligará a Scott a convertirse en el nuevo Santa y asegurarse de que la ilusión navideña siga viva.
En la noche de la víspera de Navidad, un niño intenta pillar a Santa Claus y su trineo desprevenido mientras hace su trabajo, pero lo que no se imagina es que terminará emprendiendo un viaje en el tren más mágico que ha visto nunca en dirección al mismísimo Polo Norte. Una aventura divertida y educativa que nos invita a creer.
7. Cuento de Navidad de Mickey (1983)
Mickey, Donald y Goofy nos acompañan en una historia navideña que revisita el cuento de Dickens adaptado a los más peques. Juntos enseñarán al avaricioso señor Scrooge que la magia en realidad reside en la bondad y la generosidad.
El peor estudiante de la academia postal es enviado a Smeerensburg, una isla más allá del Círculo Polar Ártico donde el frío no solo se siente en el termómetro, sino en las (inexistentes) relaciones de sus ciudadanos. Aliado con la profesora del pueblo, encuentran a Klaus, un carpintero que fabrica juguetes a mano y que será el responsable de devolver la ilusión y la alegría al lugar, instaurando la tradición navideña.
5. Rudolph: el reno de la nariz roja (1998)
En la variedad está la riqueza, esa es la enseñanza de este clásico navideño. La película cuenta la historia de Rudolph, el reno del trineo de Papá Noel que, a diferencia de sus compañeros, tiene una nariz roja que se ilumina y sirve de guía. Un don por el que sufrió bullying y le hizo huir al Polo Norte, donde se enfrentará con toda su valentía a la malvada reina de los hielos para salvar la Navidad.
El clásico de Tim Burton es perfecto para enseñarle a los niños que la bondad y la empatía son las mejores cualidades en una persona y algo que celebrar en estas Fiestas. Durante la noche de Navidad, conocemos la historia de Eduardo Manostijeras, un muchacho creado por un extravagante inventor que no pudo acabar su obra y le condena a tener cuchillas en lugar de dedos en las manos.
El éxito de Frozen no tiene parangón en los filmes infantiles, musicales y navideños. Amistad, compañerismo, el valor de la familia y la bondad son las enseñanzas que sacamos en claro de esta película, que nos cuenta la profecía a la que está sometido un reino. Anna, Kristoff y Sven van en busca de Elsa, la Reina de las Nieves, para que ponga fin a ese invierno eterno que asola a su tierra.
2. Charlie y la fábrica de chocolate (2005)
Charlie Bucket es un niño que viene de una familia muy pobre, pero su vida da un giro cuando encuentra un ticket dorado en una tableta de chocolate, su billete a la gran fábrica de chocolate de Willy Wonka. Charlie, junto a otros cuatro niños de diferentes partes del mundo, pasarán una jornada con los Oompa-Loompas en el mundo fantástico de Wonka, mientras descubren que la bondad es el mejor regalo.
1. Un vecino con pocas luces (2006)
El primer puesto se lo lleva esta comedia que reduce la rivalidad al absurdo, sobre todo en unas fechas tan señaladas donde la ilusión y el compartir son las protagonistas. Steve Finch adora la Navidad hasta el punto de que su familia ya no puede aguantar más sus tradiciones/imposiciones apuntadas en un calendario de diciembre. Todo cambia cuando Buddy Hall se convierte en su nuevo vecino.
Por María Toro
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